sábado, 26 de diciembre de 2020

La Bruja Lola y el Bosque del No



La Bruja Ulula y el Bosque del No




Gabriel era de Costa Rica, pero vivía en Madrid. Al principio se mostraba algo taciturno y costaba arrancarle las palabras. En la clase de al lado estudiaba su hermano Adrián. En realidad no eran hermanos, pues Gabriel había sido acogido por los padres de Adrián, del borde de Adrián, que no paraba de proclamarlo a los cuatro vientos. «El sudaca», le decía. Pero luego, todo cambió. Porque después de lo que pasó, ya  no lo volvió a decir, es más, arremetía contra aquellos que se burlaban de Gabriel, que cada vez fueron menos. Después le llamó «hermano» y estuvo siempre pendiente de sus cosas. ¿Por qué? Esta historia te lo cuenta... ¿Sigo?

Todo empezó una noche, en el mes de diciembre, muy cerca de las navidades. Habían ido de compras y Adrián volvía contento. Se había sa- lido una vez más con la suya.

–Los tengo dominados –decía orgulloso. Tanto había mareado a sus padres que le habían comprado su regalo, su caro regalo.

–Es cuestión de práctica, y ya le voy cogiendo el tranquillo – comentaba en su habitación mientras quitaba su antigua lámpara de la mesilla de noche para sustituirla por la nueva. Su hermano lo miraba desde el umbral de la puerta.

–Papá ha dicho que lo esperes, que es peligroso andar con enchu- fes, que ya lo hace él.

–No me hace falta ayuda para cambiar una clavija por otra. Y no es tu padre.

–Él quiere que lo llame así.

–Y yo no. ¿Sabes? El otro día les oí hablar. Tú eres una especie de medicina. Eso fue lo que dijeron: «Medicina para curarme y dejar de ser un niño demasiado consentido». Eres como el jarabe asqueroso que me tomo para la tos.

Ese era Adrián, el borde de Adrián. Gabriel no dijo nada. Se quedó mirándolo. Su hermano, pues así querían sus actuales padres que lo lla- mara, se afanaba en poner su nueva lámpara en la mesilla de noche. Era una bruja regordeta, achatada y de pómulos brillantes. Vestía de violeta  y posaba al lado de una perola llena de burbujas, trozos de reptil, cabe- zas de ratón... y en la que flotaban dos ojos que a Gabriel se le antojaron como de niño náufrago.


Cuando sus padres llegaron a la habitación, Adrián tenía ya encen- dido su nuevo regalo. Para que pudiera lucir mejor, había apagado la pantalla con cara de Goofy que colgaba del techo. Y allí estaba la bruja, proyectando luz desde sus adentros con sus ojos pérfidos y su boca desdentada.

–¡Qué cosa más horrible, niño! –dijo Beatriz, su madre.

–A mí me gusta. Tened cuidado al entrar en esta habitación. Puede ocurrir cualquier cosa–comentó Adrián poniendo voz de ultratumba.

–¡Cualquier cosa es lo que pudo haber ocurrido! Te dije que espera- ras. No me gusta que andes con enchufes –añadió su padre, molesto.

Un silencio espeso se dejó sentir en la casa. Adrián hizo como si no fuera con él. La madre quiso aliviar la situación.

–Mejor será que apagues por ahora la lámpara y te duches. Y tú lo mismo, Gabriel. La cena estará en breve.

Media hora más tarde estaban sentados a la mesa Vicente, que así se llamaba el padre, Beatriz y Gabriel. Se miraban unos a otros.

–Adrián, te estamos esperando. Baja ya –dijo su madre alzando la

voz.

–No quiero cenar todavía.

–Baja inmediatamente –le ordenó su padre.

–¿Qué hay de cena?

–Espaguetis. Están muy buenos. Baja ya, que se enfrían –comentaba

la mujer.

–¡Qué asco! No quiero. Hazme una hamburguesa.

Miguel Sánchez, La bruja Ulula y el Bosque del No.

Ed. SM. El barco de vapor.


 

 

Comprensión Lectora

1    ¿De dónde era Gabriel? ¿Dónde vivían Gabriel y Adrián?

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2    ¿Cómo llamaba Adrián a Gabriel antes de decirle «hermano»?

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3    Marca con un ü el regalo consiguió Adrián.

 

Una bruja de peluche. Una nueva lámpara.

Una clavija nueva para arreglar su lámpara antigua.

4      En el texto se describe el regalo que consiguió Adrián. Dibújalo

intentado representar todos los detalles que se dicen.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


5     ¿Cuál fue la reacción de la madre de Adrián al ver la lámpara en- cendida?

 

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6    ¿Por qué crees que los padres de Adrián acogieron a Gabriel?

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7    ¿Cómo se llamaban los padres de Adrián?

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Uso de la Lengua 

8     Escribe las palabras subrayadas en la lectura al lado de su sinóni- mo correspondiente.

 

alegre

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viejo

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satisfecho

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intratable

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costoso

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caprichoso

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sabroso

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repugnante

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9         Responde a las siguientes preguntas.

a)   En el texto aparece la palabra ultratumba, ¿qué crees que significa? Ayú- date del diccionario si lo crees necesario.

 

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b)   ¿Qué significa el prefijo ultra–?

 

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c)   Escribe el significado de estas palabras:

 

ultramar:        …………………………………………………………………………….

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ultraligero:     …………………………………………………………………………….

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ultrasensible:    …………………………………………………………………………..

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ultrasonido:    …………………………………………………………………………….

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Desde que mi padre es un arbusto



 


Antes vivíamos en otro lugar. […] En nuestra ciudad todo el mundo pronunciaba bien mi nombre. Donde vivo ahora, sin embargo, no saben decir la letra k, y como mi nombre tiene cuatro, el primero que intentó pronunciarlo casi se rompe la lengua. De momento digo que me llamo Ina, que son las tres últimas letras que forman mi nombre.

Nuestra ciudad era muy pequeña, aunque a mí me parecía bastante grande. Mi madre no vivía con nosotros. En realidad, yo casi ni la cono- cía, pero tenía una foto suya en la que salía muy sonriente.

Cuando hablaba con ella por teléfono, no sabía muy bien qué decir. Ella me aseguraba que me echaba mucho de menos, y yo no compren- día por qué no venía, entonces, a vivir con nosotros. Mi padre me había contado que mamá se fue poco antes de que yo cumpliera un año. Pero no por mi culpa, sino porque todo se le hacía demasiado, aunque no me llegó a explicar qué era exactamente todo eso que se le hacía demasia- do. Y yo tampoco se lo pregunté nunca.

Antes de ser un arbusto, mi padre era pastelero y se levantaba to- dos los días a las cuatro de la mañana para preparar veinte tipos de pas- teles y tres tipos de tartas.

Luego lo vendía todo y la gente se lo comía al momento, de modo que al día siguiente se tenía que levantar otra vez a las cuatro de la ma- ñana para preparar de nuevo veinte tipos de pasteles y tres tipos de tar- tas. Él siempre me decía que, cuando fuera mayor, más me valía elegir otra profesión. Según él, era mejor vender algo que la gente no se co- miera al instante. Pero a mí me gustaba su trabajo, porque olía muy bien. Una noche, mi padre me sentó en su regazo y me dijo que ya casi nadie compraba pasteles.

Las cosas no iban bien en nuestro país: en el sur, los unos habían empezado a luchar contra los otros. Donde nosotros vivíamos, todavía no, pero si seguían así podían ponerse a pelear también en nuestra ciu- dad. Me dijo que la abuela vendría a vivir una temporada conmigo, por- que él se tenía que ir a defender a los unos contra los otros, a pesar de que algunos de sus amigos estaban ahora en el bando de los otros. Él prefería mil veces hacer pasteles, pero no le quedaba más remedio que irse.

Me enseñó un librito de color verde oscuro que se titulaba Todo lo que debe saber un buen soldado. Había un capítulo dedicado a técnicas de camuflaje. Yo ni siquiera sabía qué significaba aquella palabra.


–El camuflaje es el arte de mimetizarse con el entorno –me explicó mi padre–. Un soldado debe ser capaz de ponerse a cubierto de forma que el enemigo no sepa dónde está, aunque pase por delante de él.

Había una foto de un soldado disfrazado de arbusto.

Joke van Leeuwen, Desde que mi padre es un arbusto...

Ed. SM. El barco de vapor.


 

 

Comprensión Lectora

1    ¿Por qué el protagonista de la lectura quiere que lo llamen Ina?

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2    ¿Qué era lo único que Ina tenía de su madre?

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3    ¿Cuál era la profesión del padre de Ina? ¿Qué hacía en su trabajo?

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4     ¿Por qué el padre de Ina no quería que ella tuviera de mayor su profesión? ¿Por qué a ella sí le gustaba?

 

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5    ¿Qué estaba pasando en el país donde Ina vivía?

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6    ¿A qué se refiere Ina cuando dice que su padre es un arbusto?

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Uso de la Lengua

7      Busca en la lectura un sinónimo de cada una de estas palabras: móvil, repostero y pelear.

 

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8      Busca en la lectura un antónimo de cada una de estas palabras: mal, siempre, norte y comprar.

 

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Expresión escrita

9    Inventa un nombre para el protagonista de la lectura.

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10     Busca en el diccionario el significado de la palabra camuflaje y describe cómo crees que el padre de Ina se camuflaba de sus enemi- gos.

 

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